Da la vida por su fe
San Sebastián fue un mártir de la fe cristiana, oriundo de Milán, Italia, de familia militar. Se cree que nació en el 263 d.c. La iconografía de éste es amplia, pero la imagen más común es la de un hombre semidesnudo atado a un árbol y atravesado por innumerables flechas. Cuenta la historia, que perteneció al ejército romano y era admirado por su valentía. En plena persecución religiosa, su discreción le permitió ayudar a otros cristianos que sufrían por su fe, hasta que el emperador Diocleciano descubrió sus valores cristianos, que él reafirmó abiertamente, mientras se negaba a adorar a la autoridad romana. Fue condenado a morir asaeteado, sufrió el martirio pero sobrevivió, entonces fue azotado hasta morir, en el año 304. De acuerdo con información de la página www.primeroscristianos.com, el cuerpo sin vida de San Sebastián fue recogido por los fieles cristianos y sepultado en un cementerio subterráneo de la Vía Apia romana, que hoy lleva el nombre de Catacumba de San Sebastián. Por ser uno de los santos más reproducidos por el arte, es conocido como el Apolo cristiano. Cada 20 de enero se conmemoran su vida y obra.