Viejo San JuanEl Viejo San Juan no es sólo fachadas y comercio para el turista. Porque así como el polvo se guarda bajo la alfombra, bajo las calles adoquinadas de la ciudad antigua está la rica historia de este lugar. Fragmentos de esa historia de españoles y americanos, prostitutas y zapateros, de Bombonera, Mallorca y matadero, se los conté a mi insoportable pero buena amiga Holly, aunque me haya costado la amistad de otra... ¡Perdóname Magali!