Una de las principales efemérides en la historia de Puerto Rico es el Grito de Lares. Esta gesta revolucionaria, llevada a cabo en el siglo 19, significó la consolidación de la nacionalidad puertorriqueña ante el régimen colonial español de entonces.

El 23 de septiembre de 1868, unas mil personas llegaron a la Hacienda El Triunfo, propiedad de Manuel Rojas, en el barrio Pezuela de Lares, para desde allí salir de noche hacia el espacio urbano de ese pueblo. Los revolucionarios partieron de la hacienda de Rojas, jefe general de las tropas, gritando “Muerte a España, Viva la libertad, Viva Puerto Rico libre”. Entraron victoriosos a Lares y tomaron como rehenes al alcalde y a varios funcionarios españoles, para de inmediato declarar la República de Puerto Rico e instaurar un gobierno provisional presidido por el lareño Francisco Medina Ramírez.
Temprano en la mañana, un grupo de revolucionarios salió hacia el pueblo de San Sebastián del Pepino para continuar con los planes de la revolución que, como estaban concebidos, los llevaría hasta la capital luego de haber tomado algunos de los pueblos de la ruta que fue trazada por el principal líder del Grito de Lares, el doctor Ramón Emeterio Betances. Los revolucionarios que quedaron en Lares participaron de una misa en la cual el párroco Gumersindo Vega ofreció un Te Deum (para dar gracias a Dios). Frente al altar, los revolucionarios desplegaron la bandera de la independencia diseñada por Betances y bordada por Mariana Bracetti, una de las revolucionarias.

Pero las fuerzas independentistas enfrentaron un fracaso militar en el Pepino el 24 de septiembre y tuvieron que dispersarse aún cuando pensaban que iban a regresar, un plan que no lograron.
El gobierno español persiguió sin misericordia a los revolucionarios y cientos fueron arrestados y encarcelados. Según investigaciones históricas recientes, unas 600 personas fueron encarceladas. Por el hacinamiento, y otras razones, murieron tras las rejas 85 personas en tres meses. Otras ocho personas habían fallecido en combate en San Sebastián y resistiendo la persecución de las tropas españolas.

Lugares relacionados
La plaza de Lares lleva el nombre de Plaza de la Revolución en honor a la revolución que fue el Grito de Lares. Ese nombre fue aprobado por la alcaldía lareña en 1925, y en 1927, se inauguró el obelisco en reconocimiento a los héroes y mártires de la gesta libertadora. En 1932, Pedro Albizu Campos, líder del Partido Nacionalista, en conjunto con otros líderes, sembró en tierra traida de todas las repúblicas latinoamericanas el árbol llamado Tamarindo Sagrado, justamente al lado del obelisco. Fue precisamente Albizu Campos quien, desde 1930, había iniciado el llamado peregrinar a Lares. Desde entonces, el día del Grito de Lares es de celebración nacional y asisten personas de todo Puerto Rico para conmemorar la efeméride.

En la Plaza se encuentran, además, un busto de Ramón Emeterio Betances, creado por el escultor Rafael López del Campo, y un mosaico del artista Elizam Escobar, que es una réplica del croquis hecho por Betances para establecer la ruta que tomarían los revolucionarios hasta llegar a la capital.
El cementerio de Lares fue construido en el siglo 19 y en él se encuentran las tumbas de varios de los revolucionarios. Una de ellas, localizada en el pasillo central, tiene un asta con la bandera de Lares y una tarja que menciona algunos datos relacionados con la efeméride.

La calle del Anón es la vía principal por la que entraron los revolucionarios al pueblo el 23 de septiembre de 1868. Es en el puente del mismo nombre donde todos los años se reúnen los “peregrinos” que llegan a Lares, y desde ese lugar inician los actos conmemorativos.
En el Museo Recursos Históricos de Lares puede encontrar información histórica general de Lares y de

El Grito
En 1970 el Instituto de Cultura Puertorriqueña colocó varias tarjas en estructuras de valor histórico vinculadas al Grito de Lares. Puede encontrarlas en la Alcaldía y en la Iglesia Católica. El ICP instaló otra tarja en la Hacienda El Triunfo, pero actualmente se encuentra en el Centro Cultural 23 de Septiembre, en la Calle Lecáraz, al lado de la Iglesia.

Creaciones artísticas sobre Lares
El poeta puertorriqueño Luis Llorens Torres escribió una obra y un himno a Lares a principios del siglo 20. La obra lleva el título de El Grito de Lares. Una segunda edición está por publicarse pronto. El Himno de Lares fue grabado en 1990 con la voz del barítono Iván Martínez y la Agrupación de Cámara Padre Antonio Soler. Existe una amplia bibliografía Sobre el Grito de Lares.

Por Che Paraliticci

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